lunes, junio 09, 2008

PENSAMIENTO POSITIVO Y SÚPER YO (II)

PENSAMIENTO POSITIVO Y SÚPER YO (II)


Al llegar aquí es preciso hacer historia "evolutiva". Es conocido que diversas especies, y entre ellas las más evolucionadas, poseen una vida social o comunitaria cada vez más compleja. La evolución ha propiciado este hecho debido a su evidente ventaja evolutiva, muy conveniente para la conservación de la especie (pensemos, por ejemplo, en la técnica de caza comunitaria del lobo, o de las orcas, o la vida social de los monos, etc.). Así que no es nada extraño que la misma especia humna guarde en su interior esa "tendencia biológica" hacia la sociabilidad; su desarrollo ha hecho posible la civilización humana, y su logro fundamental ha sido el lenguaje elaborado. Por consiguiente, no es extraño que sea "algo natural" el encumbramiento en el cerebro humano de esas ideas sociales que han sido tan importantes a lo largo de su historia biológica (por supuesto, también cultural); es decir, ha sido algo natural, algo considerado de siempre prístino, incrustado de forma sustancial en la naturaleza humana. Pero la mente humana no parece tener límites y menos en su extensión temporal futura: ¡ha llegado el momento de que la mente humana pueda "desprender de sí" todo aquello que la atenaza y que le impide crecer hacia el infinito!
Para ello es básico conocer el mecanismo, el origen de este súper yo. De esta forma, si el proceso es lo suficientemente fuerte, o está incrustado de forma biológica de manera que fuese casi imposible su eliminación, sí -si es suficientemente conocido su mecanismo- podría ser utilizado en nuestro provecho ( sacando ventaja de las desventajas), potenciando precisamente ese "ansia" de superación de barreras, en un futuro sin límites.
No hay que dejar que las ideas, sean cuales sean las mismas, nos desborden, nos superen y para ello debemos "controlar" en todo momento dicho proceso. Así que todo se reduce a "control", lo que puede llevarnos a que el espíritu "señoree" sobre el cuerpo: