martes, abril 28, 2009

FILOSOFÍA ALEMANA (JASPERS I)

KARL JASPERS (1882-1969)


Nace en Oldenburgo y muere en Basilea. Estudió medicina y trabajó desde 1909 en la Clínica Psiquiátrica de Heildelberg. De 1916 a 1920 fue profesor de psicología en la Universidad de Heildelberg, y desde 1920 Catedrático de Filosofía en dicha universidad. En 1948 se instaló en Basilea, en cuya universidad fue profesor hasta 1961.
Desde 1931 Jaspers estudió la obra de Kierkegaard, pero su punto de partida fue Kant. Según Habernas el existencialismo jaspersiano es un "neokantismo", sin embargo tomó de Kierkegaard la "reflexión sistemática y metódica a partir de la experiencia personal". Como Kant, Jaspers niega la posibilidad del conocimiento absoluto, pues la "cosa en sí" o verdad última es inaccesible a la mente humana. Ese muro infranqueable que separa al sujeto de la verdad objetiva convierte la vida en trascendencia, que no es revelación de una verdad metafísica, sino búsqueda incesante de una orientación en medio de la más radical inseguridad.
También como Kant niega que la existencia de Dios puede demostrarse con argumentos lógicos, ya que Dios no es "revelación", sino "ocultación".
Aunque Jaspers parte de la experiencia personal, su sistema de pensamiento no es una variante del subjetivismo o de la filosofía del yo, puesto que es la comunicación con los otros donde cimenta el sentido de la vida individual. "Ser sí mismo es sólo real en comunicación con otros sí mismos". (Reschenschaft und Ausblick).
Una comunicación intersubjetiva no es un simple contacto en el plano de la convencionalidad, sino que tiene como supuesto previo la toma de conciencia de la persona como ser en sí. Y la comunicación tampoco ha de entenderse como una superación definitiva de la soledad: es un proceso dialéctico que contiene esa alternancia, como momentos constitutivos, tanto el principio de la soledad como el de la comunicación. "Yo no puedo llegar a ser yo mismo sin entrar en comunicación, y no puedo entrar en comunicación sin estar solo". (Philosophie).
Para Jaspers el ser humano enfrenta el mundo con diferentes actitudes: objetivas, que llevan a lo asequible, al movimiento, a la comprensión de su situación y la elección de sus posibilidades; autorreflejadas, que están referidas a cuando nos vemos a nosotros mismos, con nuestras particularidades, nuestro mundo o vida vivida; y entusiásticas, que se refieren a cuando la mirada y la reflexión apunta a lo ilimitado.
En opinión de Jaspers, las imágenes del mundo nos conducen a la comprensión del mundo y a la percepción de la fuerza que encierran para el alma humana. Y estas imágenes pueden ser: sensitivo-espaciales, como la de Giordano Bruno; anímico-culturales, como las que se describen por la historia de las culturas, y la metafísica del propio mundo. Con esta última imagen del mundo percibimos que el mundo busca la totalidad y lo último. De esta forma, Jaspers arriba a la vida del espíritu, afirmando que mientras las imágenes del mundo son "abstracciones que aíslan lo que de hecho existe junto, que tratan como elementos autónomos lo que tiene existencia solamente en servicio o como fenómenos de fuerza", su posición es más profunda que tal imagen del mundo, pues concibe que la esfera del espíritu es más abarcadora, ya que comprende la totalidad de la vida humana. La vida del espíritu llevaría al hombre a llegar a ser sí mismo y la auto-conciencia y la experiencia de la voluntad acontecen en la reflexión, por lo que: "cuanta más conciencia, tanto más sí mismo".
(De la obra "Paradigma", publicada en Biblopia.com)